lunes, 31 de marzo de 2014
DE NUEVO MAGIA EN EL AMBIENTE, " CICATRICES DE LA MEMORIA".
Después de una semana agotadora, llegué a Benalmadena, muerto, era el viernes 28 de marzo de 2014 y habíamos quedado para ensayar , en casa de Anai, Cicatrices de la memoria.
Fue ver a Anai esperándome en su coche, en la estación del cercanía de Torremuelle y entrarme unas ganas enormes de trabajar.
Llegamos a su casa y nos pusimos a repasar todo lo anterior y el texto de la nueva escena y cuando llegó Salva, que esperaba hacer unos ejercicios de calentamiento con nosotros, nos vio tan metido en faena que comenzamos con el trabajo directamente.
Repasamos la escena uno y dos varias veces y la comentamos, dándonos indicaciones.
Luego le hicimos la escena nueva, la tres, empezamos con el ejercicio que nos puso de hacer castillos con los libros y de ahí se fue montando la escena entera.
Para acabar acompañado de choricito, lomo y queso, que nos puso la grandisima Anai, leímos nuevas escenas y nos mandó nuevo texto para estudiar y trabajar.
Estoy metido en mil y una cosa, pero en estos ensayos, es donde disfruto de verdad, es como nuestro espacio, donde me siento actor de verdad, donde de nuevo volví a crear de la nada,donde de un texto se saca la esencia y salen personas que no somos nosotros, sino Teo y Ana.
Es en estos ensayos donde me doy cuenta que en la ESAD se aprende realmente cosas, porque es ahí donde veo que, puedo hablar con él de forma que antes no sabía, usar técnicas aprendidas, tener un lenguaje más cercano y más profesional del que tenía antes.
Que grande es Salva, cómo puede sacarnos tanto sin a penas esfuerzo, cómo lleva todo tan preparado y definido en su cabeza, cómo te da indicaciones casi sin darte cuenta, cómo se puede dialogar con él y que placer trabajar con Anai, que profesional, cuando empieza no acaba, que facilidad para adaptarse a los cambios, que compañerismos, que confianza, que feliz soy en esos momentos que pasamos los tres juntos.
El otro día en la penumbra de ese pequeño salón, con Anai y yo tirados en el suelo, un montón de libros tirados a nuestro alrededor y Salva enfrente mirándonos, le di gracias a Dios, por ese momento y por haberme encontrado con esas dos personas en mi vida y me sentí FELIZ y un privilegiado por vivir ese momento, no se si llegaré a algo o no, pero estos ensayos , son el resultado de años de trabajo y me siento contento y satisfecho.
Gracias Salva y Anai,otra vez.
Salí tan feliz del ensayo, que fue corto, debido a nuestras agendas, que en el tren de vuelta me aprendí todo el texto nuevo.
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