domingo, 3 de marzo de 2019

CÓRDOBA TE DEBO MIS EMOCIONES.


No puedo dormir y voy a aprovechar para  escribir la crónica de: ¡¡¡Esta noche inolvidable en Córdoba!!!. Una ciudad que se ha portado magníficamente con Saborearte y que me ha dado mucho más de lo que ella pueda pensar, casi se puede decir, que me ha reconciliado con la profesión. ¡¡¡Gracias Córdoba!!.

Estoy desvelado, no me puedo dormir. Es curioso porque hace unos minutos estaba que me caía por los rincones y ahora que son nada más y nada menos que las 3:44 de la madrugada no puedo. Estoy  "durmiendo" o intentándolo, en Córdoba, concretamente en casa de la madre de Elena, por cierto, ahora también tengo hambre. ¿ Sabéis por culpa de quién me pasa todo esto? ¡¡ Por culpa de Rafi!!.

Veréis lo que me ha pasado, he salido de la actuación de Las cenas de las emociones, hoy, sábado 2 de marzo del 2019, en el Hotel Córdoba Center, reventado, pero a nivel, últimos días de Semana Santa, hasta me había quedado sin voz. Y no porque la hubiera forzado durante la actuación, sino porque el nivel de agotamiento y el gasto de energía ha sido enorme.

Al acabar todos estábamos con la adrenalina a tope, nos hemos despedido, hemos recogido etc. Pero después hemos esperado mucho rato sentados, ya que había “muchossss” tramites que acabar y ese tiempo, creo que me ha matado, me ha entrado el bajón y ya no podía ni con mi alma, los ojos se me cerraban y deseaba dormir, hasta el hambre se me quitó.

Al final llegamos a nuestro destino, la casa de Rafi, madre de Elena, me senté en un sofá y no podía ni hablar, pero la madre de Elena tiene tanto arte, pero tanto que se ha puesto a hacer bromas, a contar anécdotas, historias y yo no podía parar de reír. ¡¡ Qué arte más grande!! Me entraron ganas de decirle:” Quítate el pijama y vámonos de paseo por ahí”. Así que ahora estoy espabilado y no me puedo dormir. Por tanto aprovecho y os escribo la crónica de hoy y así no olvido nada:

La ultima frase de esta noche en Las cenas de las emociones, la he dicho yo y ha sido la siguiente:" Sois el mejor publico de Andalucía". No sé si debí hacerlo, pero es que cuando  vi a todo el publico en pie aplaudiendo, tan felices y con tantas ganas, no me pude retener, tenía que soltar eso que ellos me habían hecho sentir durante toda la noche.

A lo tonto a lo tonto llevo casi nueve meses metido en este proyecto y puedo asegurar que como el público de esta noche ninguno, es más, hasta interiormente, como actor, habrá un antes y un después de la función de Córdoba y la canción La gata bajo la lluvia, siempre será el recuerdo de esta experiencia maravillosa.

Esta noche es que han pasado tantas cosas por mi cabeza, ha sido un cumulo de sensaciones tan extraordinario. Muchos son los culpables de esto, pero creo que el equipo de camareros  y cocina del hotel ha sido uno de ellos. Nos han tratado como reyes, pero cada uno en su sitio. Me explico,  a la hora de empezar,  los camareros iban por su lado y nosotros, los actores, por el nuestro y creo que esto ha creado un nivel de separación que ha hecho que cada uno se concentre en su tarea  y todo cuadre como un reloj.

El otro factor y el mejor de todo, sin lugar a dudas, ha sido el público,  se lo ha pasado bomba, ha estado al cien por cien, todo era una fiesta, un jaleo, pero cuando se exigía silencio, parecía que la sala estaba completamente vacía porque el silencio era total y si alguien o algún grupillo no guardaba silencio con un simple "shuuu" se callaban. Han sabido meterse en el juego, dejarse llevar, disfrutar y sobre todo respetar nuestro trabajo, que eso a veces es muy difícil de recibir y por ello me han tenido media noche emocionado.

Debido a la estructura de la sala, he me sentido un poco alejado de mis compañeros, iba más a mi rollo, pero creo que eso me ha servido también para estar más metido en mi personaje y no estar entrando y saliendo o contaminándome de otras sensaciones externas. De hecho en las escenas que no salía me iba a un habitáculo que había junto a nuestro lugar de actuación y descansaba, repasaba y vivía al personaje.

Pero pese a eso, antes de empezar recibí un fuerte abrazo de Paula que previamente me había preguntado si estaba nervioso, le dije que sí, pero mentí, bueno medio mentí, no estaba nervioso, al contrario, deseaba actuar y soltar a ese Víctor, pero por otro lado estaba tan deseoso de actuar y  tan seguro, que en el ultimo momento sentí un poco de vértigo por si esa sobre seguridad o esas ganas,  me hacían descontrolar la energía y que se me fuera todo al traste. Después a lo largo de la noche, Paula y yo cada vez que nos encontrábamos, en los descansos, no hemos puesto a bailar, a besarnos, a abrazarnos y a festejarnos. Creo que los dos estábamos muy felices con los cordobeses y había muy buen rollo entre ambos.

Mi personaje recibe al público y fue genial. Cada vez que mi egocéntrico personaje pedía aplausos sonaban y fuertes. De hecho me coloqué, de forma improvisada, en el centro de un sol que había dibujado en el suelo del hall del hotel. Todos tenían ganas de pasarlo bien ya que, crearon diálogos con mi personaje pero repito siempre con mucho respeto.

Es verdad que me trabé un poco en mi presentación pero eso no me restó ganas de actuar, se hicieron todos tan cercanos,  durante la presentación que cuando estaba actuando, ya en el interior de la sala, parecía que actuaba para amigos.

Empezó la pieza, y el silencio fue tal que creo que me crecí, me noté  muy a gusto y  tranquilo. Sentía que todo estaba bajo mi control, especialmente el personaje y podía llevarlo por donde quisiera y lo paseaba, lo colocaba y lo disfrutaba a mi antojo. Además, el publico al ser tan bueno, me hizo crecerme más.

La segunda escena creo que estuvo muy  bien, como siempre, trabajar con Raúl es un enorme placer. Esta es éxito seguro, pero esta vez la reacción fue más fría y creo que se debió a que no supe colocar bien los toques de humor. En un momento de clímax de esta escena y ya  casi al final fue cortada por  aplausos. Esto a mí me subió el ánimo por las nubes, no solo estábamos ante un público respetuoso sino que también eran agradecidos.

Además de esta escena, fueron aplaudidas dos más y aunque la pieza no es cómica, tiene ciertos golpes de humor, que hoy han sido recibidos con risas autenticas. Es que no sé, hay tanto que contar, es que todo ha sido un como un sueño.

La parte musical hoy se ha modificado un poco y creo que ha sido un acierto, por ejemplo en la nueva parte musical de la escena dos yo estaba, ya, casi en éxtasis.

La tres ha sonado más fluida que nunca, en la cuatro no salgo yo, así que estaba al otro extremo, sentado oyéndola. Esta escena suele ser un poco parada, empezó así, pero acabó, creo, mejor que nunca y Paula y Raúl estuvieron geniales. El principio de la cinco fue apoteósico, ¡¡¡Como nunca!!! De hecho estaba actuando y a la vez pensando en lo maravilloso que estaba saliendo todo.

La sexta fue muy bien y el fin de esta provocó otro aplauso y una fiesta entre todos.

Llegó un momento de fiesta, donde quise  compartir mi alegría con todos, con mi compañera Paula y hasta con la comercial del hotel.

Las muestras de cariño hacía el público han sido sinceras y constantes y el agradecimiento de ellos también.

La escena siete ha estado genial, como siempre, aunque es verdad que esta vez mis fuerzas empezaron a flaquear, me sentí cansado y con muchísimas calor.

Con la ocho llegábamos al final y no me podía aguantar más y tuve que escribí en Instagram lo feliz que me estaba haciendo Córdoba.

Por cierto al terminar la escena 8 tuve un percance (por llamarlo de alguna forma ya que no puedo dar datos reveladores de la pieza)  con una comensal donde no hemos parado de reír.

La nueve estuvo muy bien aunque me sentí un poco raro, porque  durante los ensayos intentamos darle un nuevo  toque con menos intensidad y creo que la hemos hecho muy alta, además en algún momento me sentí inseguro. Llegamos a la diez, la más complicada,  en la que Paula y yo damos más, la que normalmente cuesta pillar porque el publico suele estar demasiado animado, pero que esta vez la han aprovechado al máximo quizá no ha sido la vez que la hemos hecho mejor,  pero ha estado genial.

Quiero dejar de escribir ya, porque no quiero alargarme y porque son cerca de las  cinco pero tengo tantas sensaciones y emociones que contar, ha estado todo tan cuadrado, tan bonito, que los cordobeses me han hecho disfrutar cada segundo y hacer,  yo,  y no ellos todo un viaje emocional.

Esta es una profesión dura, llena de altos y bajos, muchos sinsabores, muchas veces  quieres tirar la toalla, últimamente más,  ves que no encajas en los perfiles que salen,  ves que a veces no te llaman porque no eres muy amigo de.... o al contrario felicitan tu trabajo porque eres amigo de... cuando ves que para trabajar debes andar viajando siempre, cuando piensas que lo importante es el audiovisual y no te sale nada de trabajo ahí, etc. A veces la profesión te cansa, pero cuando ves que llegas a lugares como Córdoba donde no conoces a nadie, ni te conoce nadie, llegas humildemente, haces tu trabajo y esta gente sin perjuicios te reciben con el corazón,  se entregan, te ayudan, te dan energía para actuar, refuerzan tu trabajo y disfrutan y te hacen disfrutar. Esto genera una magia que hoy me ha hecho reconciliarme con mi profesión, volverme a re enamorar de ella, coger seguridad y reafirmarme en que quiero ser actor porque vivir esta sensación ,aunque sea de tarde en tarde, merece la pena todo. Eso me lo ha enseñado CORDOBA Y SU GENTE.

¿ COMO UN SITIO DESCONOCIDO PUEDE ACOGERTE TAN BIEN Y HACERTE SENTIR EN FAMILIA?

GRACIAS CORDOBA

1 comentario: