El pasado 16 de julio de 2021. ¿Fue un éxito el estreno de Éxito?. Pues no lo sé la verdad. Fue todo muy raruno. No tengo una opinión clara.
No la tengo porque hace casi 2 meses que se estrenó y no tomé ni una nota previa, pero es que cuando bajé del escenario mi cabeza era un caos, y la retroalimentación posterior, tampoco fue muy despejada, así que no sabía ni qué poner, ni qué pensar.¿ Os cuento todo lo que viví y ya sacáis vuestras conclusiones.?miércoles, 29 de septiembre de 2021
ESTRENO DE "EXITO" EN CAMPILLOS.
FOTOS DEL ELENCO DE ASPIRANTES A CANTANTES DE "EXITO".
miércoles, 8 de septiembre de 2021
CUMPLIENDO AÑOS CON MANUEL AGUSTIN.
El jueves 15 de julio del 2021, a las 10:00 h. Se cumplían 45 años de mi nacimiento, o sea más coloquialmente, que era mi cumple.
Fue un día de paseo mañanero, de recibir retroalimentación del estreno del día anterior y sobre todo grandes noticias con respecto a ciertos compañeros.Recuerdo que las recibí cerca de las puertas del hotel AC Málaga Palacio y pensé que ese sí que era un gran regalo, pues tras recibir el notición, me decidí divertir y pasarlo bien y claro que lo hice. Celebré el cumple con mi familia, mi tarta, la visita de mi sobrina , un video precioso que me regaló esta y nuestra comida, en casa, de McDonald's.
Pero a las 20:00 h. era la celebración oficial, así que sobre las 19:00 comencé a prepararme.
Tras una breve merienda y un descanso, comencé a ponerme a punto para, como digo, la celebración oficial, que tendría lugar en el paseo marítimo de Huelin, pues volvería a actuar y a meterme en la piel de Manuel Agustín Heredia dentro de Los paseos por la Málaga industrial: Huelin y sus personajes. ¿ Hay mejor manera de celebrar un cumple que haciendo teatro?.
Era el día de mi vuelta, pues el miércoles 14 de julio como estaba en Campillos no puede actuar y me sustituyó un compañero, pero además era el día de mi despedida porque esa tarde se acababan las visitas.Una vez más todo siguió el orden establecido y fue de nuevo como un ritual.
Desde antes del almuerzo lo tenía todo organizado. Sobre las 19: 30h. subí a la salita de casa, revisé todo, especialmente mi mochila, me quité la camiseta, me maquillé, cosa que de nuevo tuve que hacer en el dormitorio de mis padres, porque el calor era horroroso.
Una vez maquillado, lo guardé todo, me lavé las manos, me lavé los dientes, me quité las pulseras , guardé toda mi ropa personal, me puse la ropa del personaje, coloqué mi pañuelo y revisé que el pañuelo quedara bien con el abrigo.Ya listo, hice un repaso completo del texto, recogí todo, bajé, cerré el garaje, organicé todo, cerré la puerta y me monté en el coche con mis padres y nos fuimos para Huelin.Lo único que modificó nuestro ritual, fue que cuando ya estaba medio vestido, mis padres me llamaron para realizar una tarea física con una alfombra, a lo cual les informé que no era el momento. Debía concentrarme y no sudar en exceso, cosa que entendieron perfectamente. Eso hizo que cuando bajé mis padres no andarán en el coche esperándome como siempre, sino en casa, terminando de ordenar.
El viaje en coche, fue tan rápido y agradable como siempre, nos hicimos nuestra foto,llegamos antes de tiempo, nos paseamos y mis padres me dejaron en el lugar de actuación.
Allí todo siguió también su ritual. Dejé las cosas a Mariangeles, me hice la sesión de fotos, repasé el personaje y esperé.
sábado, 4 de septiembre de 2021
¡¡¡GUAU!!! COMO SE HAN DESPEDIDO DE MANUEL AGUSTÍN HEREDIA.
Todo en la vida tiene dos vertientes, dos caras, dos versiones, y el jueves 15 de julio del 2021, fue el día del inicio y de la despedida.
Del inicio porque ese día iniciaba mis 45 añitos. Ese jueves era mi cumple y qué mejor manera de celebrarlo que haciendo teatro, pues volví a meterme en la piel de Manuel Agustín Heredia, pero esa tarde fue la última Visita por la Málaga industrial: Huelin y sus personajes, por tanto mi despedida de él.Despedida que también tuvo sus dos vertientes. Por un lado tuvo su parte negativa, pues nada más acabar no pude irme paseando relajadamente a mi barrio o no me pude quedar en la playa con mi compi, ya que tuve que ir a Tabacalera para una sesión de fotos con todos los compañeros. Luego, algunos no se quedaron al final, otros sí y la sesión ni se hizo, ni nadie nos avisó de que no se hacía.
Y la parte buena fue, que el tiempo de espera lo pasé con mis dos compañeras llenas de arte, Caro y Mariángeles con las que no paré de reír (ver foto del final de la entrada) y porque antes de marcharme, me paró, Fernando, el guía que hizo la visita. Este es un hombre serio, nunca me había dicho nada, pero esa tarde me buscó para despedirse así de mí. Me dijo:
" Ha sido impresionante, me encantas, siempre lo haces muy bien. He visto el monólogo ya unas 10 veces, pues me sigues impresionando y emocionando. Se te ve con mucha seguridad, mucha templanza, mucha naturalidad, mucho convencimiento. Parece que lo que estas diciendo es de verdad, que es algo tuyo. De hecho cuando acabas diciendo eso de que te quedas mirando a tus barcos y miras al mar, yo siempre miro porque lo dices de forma, que yo realmente veo los barcos. Me emocionas mucho y me gusta mucho siempre de verdad".
Yo me quedé muerto, de hecho solo me salía darle las gracias y él continuaba diciéndome cosas.
Ahora desde mi punto de vista el pase fue muy bien, pero no tanto como la última vez, puesto que me trabé un poco. Algunas se han notado y otras no tanto, pero vamos yo he seguido como si tal cosa, he mantenido la impronta del personaje, su seguridad y la mía.
Lo único malo del pase ha sido la colocación del público. Estaban muy raros. Parte estaba sentado en fila y otros de pie formando un semicírculo y los que estaban de pie tapaban a parte de los que estaban sentados. El tipo de personaje, impedía decirles que se volvieran a colocar o pasar por medio, así que la mitad del grupo no me han visto. Es más había una pareja muy separada del resto, tanto que hasta mitad de la actuación no los vi.De hecho, aunque intenté mantener mis movimientos habituales, tuve que adaptarlos un montón a la disposición del grupo para poder llegar a todos.
Pero pese a eso me he sentido muy seguro, el juego de las manos siguiendo el ritmo y el texto, me ha salido muy natural. Ha llegado un momento en el que el texto me salía y fluía solo. No es que lo estuviera tirando o soltando sin más, es que me salía como algo mío.
Eso sí había un "graciosillo", pues al hablar de mis barcos que se veían en el mar, me contestó con un :" Yo nos lo veo". Tuvo suerte que yo no era Rafael Echevarría, si no lo hubiera puesto... Pero en este personaje no podía, así que lo ignoré y seguí.
En resumen, que me lo he pasado muy bien, me he divertido, pero debo decir que me ha dado un poco de pena despedirme de mí Manuel ahora que todo estaba muy controlado. Espero que vuelva pronto.
PD: Mi Caro me hizo un regalo de cumple.
FOTOS OFICIALES DEL ÚLTIMO "PASEO POR LA MÁLAGA INDUSTRIAL: HUELIN Y SUS PERSONAJES".
Y estas son las imágenes publicadas por Eventos con Historia, de mi última actuación como Manuel Agustín Heredia el jueves 15 de julio de 2021.
Os las dejo para que las veáis.
UNA RACHA DE KMS Y CALOR.
Pues me gustó a mí eso de no irnos a Campillos muy temprano. El año anterior se salía de casa con el último bocado del almuerzo en la boca, pero en este primer día de función del 2021, salimos sobre las 17:00 h, con lo cual dio tiempo a almorzar, recoger la cocina e incluso descansar un poco.
El miércoles, 14 de julio de 2021, se iniciaba el festival de Candilejas de verano de Campillos 2021, y el encargado de llevarnos a dicha localidad, fue Juan. Él que es una de esas personas que ya no quedan, es decir buena persona, salió a las 16:00 de Benalmádena, de estar toda la mañana trabajando, se duchó, se vino a Málaga a recogernos y a reglón seguido nos marchamos para Campillos y siempre con una sonrisa en la boca, buen rollo y ganas de cachondeo.EL REENCUENTRO CON "CANDILEJAS DE VERANO".
Tal como os decía en la entrada anterior, una vez en Campillos, el miércoles 14 de julio del 2021, entramos al Colegio Publico Manzano Jiménez por la puerta grande, iniciando así nuestro Candilejas de verano 2021 y viendo ese patio de recreo inmenso, todo estaba tal cual lo dejamos en el 2020, parecía que nada se había tocado desde entonces.
El albero, seco, amarillo, símbolo del calor, la falta de aire y el exceso de temperatura cubría el suelo, un camión cisterna, regando ese albero para hacer el ambiente mínimamente agradable. El sol pegando en cada centímetro, sin el más atisbo de sombra y al fondo el escenario sin nada, solo con unas paredes blancas con distintas puertas.
Es cierto que la imagen invitaba a salir corriendo, pero yo ya sabía, por el año anterior, que unas 4 horas después y debido a la magia del teatro, ese paisaje sería este:
Como techo las estrellas y la luna, el escenario desnudo con su fondo negro y las preciosas luces de candilejas al borde del mismo, que da nombre al festival y que recuerdan a los escenarios de los años 30 y a aquellos que yo dibujaba cuando pequeño. Frente a este, las filas de sillas blancas que se pierden en la vista y ese aire fresco que por la noche hace siempre en Campillos.
Todo eso nos hace parecer a nosotros, esos cómicos ambulantes, que antaño iban de pueblo en pueblo y a mí esa sensación me encanta.
"MALA RACHA " DE PENSAMIENTOS Y EL ENSAYO PA´CUANDO.
El miércoles 14 de julio del 2021, tras cruzar el patio del colegio nos fuimos directamente al hall donde había un batiburrillo de todo tipo de cosas. Allí se acumulaban las escenografías de los 5 días de funciones. Para nosotros aquello era un jaleo pero Antonio lo tenía todo perfectamente controlado. Ese hombre tiene un gran merito.
Yo iba de subidón, con la adrenalina a tope. Estaba deseando que se pusiera en marcha toda la maquinaria, estaba tranquilo, feliz y satisfecho.
Tras algún que otro repaso más, me dispuse a preparar toda mi ropa en el escenario.
Después de solucionar todas las gestiones eran las 19:30 h, y de nuevo Antonio nos convocó en un área de sombra del patio, para realizar el ensayo de la escenografía. Cada sketch necesitaba una, y aquí vimos qué había que poner, quién montaba y quién desmontaba cada escena. Yo como tenía muchas escenas seguidas y con grandes cambios de vestuario, no me encargaron nada, mejor. Tras informarnos se hizo un repaso de estos cambios.Yo lo controlaba todo, menos los miles de cambios de vestuario, no sabía si me daría tiempo, por eso deseaba empezar el ensayo general en el escenario, para ver la obra con el espacio y el tiempo real, y así saber si eran materialmente posible dichos cambios, pero muchas barreras empezaron a separarme de ese ensayo soñado.
La primera fue que se rompió el ordenador, con lo cual no teníamos música para la obra, Antonio entro en pánico, yo intenté mínimamente, dentro de mis bastos conocimientos, ayudar, Juan lo hizo más activamente y Manu lo solucionó magistralmente. Ese chico es muy resolutivo.
Cuando Antonio volvió a la vida tras arreglar el ordenador, empezamos dicho ensayo.
"EL TERRAL" Y " LA CUBANA", BABETH Y LOLO, CAMPILLOS Y BARCELONA.
En febrero del 2018, mi madre teatral, Anai de Miguel me invitó al teatro Cervantes a ver a La Cubana, con su pieza Adiós Arturo. Ya los conocía pero Anai me insistía que tenía que ir a verlos en directo y así lo hicimos. La verdad que iba un poco exceptivo, pero al minuto de estar en el teatro y sin haber visto nada, ya me sentía rendido a los pies de este grupo catalán. De hecho al llegar a casa bicheé en Internet sobre el grupo y su elenco.
Mi descubrimiento fue la actriz que hacía de malagueña. Pensé que era una chica contratada para la ocasión, pero no, descubrí que se llamaba Babeth Ripoll y que era catalana, pues bordó el acento malagueño. Desde ese día me hice seguidor de ella en Instagram.Eso era actuar en mayúsculas. Actuaban unos 10 actores y actrices, pero hacían más de 50 personajes y cada personaje era totalmente distinto.
Pero volvamos a nuestra historia, al miércoles 14 de julio del 2021, a Campillos y a las 21:15 h, yo seguía con mi cantinela de que no había ensayado con el vestuario, pero cuando reorganicé todas las prendas en una silla y pegué el cartel/chuleta con todas las escenas donde participaba (ver foto que acompaña a la entrada), mi mente se transformó de pronto.Así que de pronto el problema y la pena, se transformó en un lujo y una oportunidad, salvando las distancias, hoy me sentiría como ellos.
Pero la cosa no acaba ahí, publiqué la foto del cartel, en Instagram, donde mencioné a Babeth a y de pronto el mapa se plegó y Campillos y Barcelona se juntaron, los 976 km que separan esas dos ciudades desaparecieron, pues cuando entré al comedor del cole para maquillarme y vestirme, leí una respuesta a mi entrada de Instagram: "Puedes con eso y con más¡¡¡". ¿Quién la había escrito? pues nada más y Babeth Ripoll.
Os puede parecer una tontería pero para mí, fue importante que ella que tiene una carrera mucho más amplia y pública que la mía me respondiera, me hacía su igual, sentía que ambos estábamos uniendo dos grupos de teatro La Cubana y El Terral.
Así que salí al escenario con las energías de Babeth, las ganas de que el público disfrute de El Terral y La Cubana y por supuesto la valentía Antonio Guerrero, Vicky Plana y Jordi Milan de crear sus propios grupos ¿ Con todos esos avales no iba a salir a comerme el escenario?.
ESTRENO DE "MALA RACHA" EN CAMPILLOS.
Al final todo salió a pedir de boca.
Y los personajes también estuvieron, todos, unos con sus más otros con sus menos pero aparecieron todos.
Recuerdo ahora mismo por ejemplo mi primera aparición, donde tuve que cambiar la voz del personaje tímido y empollón porque fue abrir la boca y el micro no se oía, así que sacrifiqué la esencia del personaje por el entendimiento del público.
Mi compañera Marisol que estaba como público, al acabar la función hizo notar el fallo del micro, pero me felicitó con un: “Pero no hubo ningún problema porque sacaste el vozarrón que tienes y todo se oyó perfecto".
El que más disfruté fue el sketch del Ahorro energético. Me dejé llevar, no lo tenía previsto, pero me salió el marido calzonazos que tanto gusta y que manejo tan bien. Esta no era la opción del director, pero es que me salió. Estaba en bata, tan bien, deseando hacer que el público se divirtiera, que fue oír el tono de mi compi María y salirme eso.
A última hora se decidieron ciertos movimientos, que se perfilaron ya en escena, mi compi se sabía el texto en esencia, pero no literal, así que me dejé ir y las risas del público no paraban de oírse. Es más noté a ese personaje vivo de verdad. Creo que el único.
Si seguí las indicaciones de Antonio en el segundo monólogo del hippie. Me pidió que lo hiciera menos bien, es decir más cómico, (leer entrada anterior). Lo empecé como un hippie malaguita guay y lo acabé casi en un clown lloroso. Si lo conseguí o no, no lo sé, pero también lo pase bomba. Tenía todo el escenario para mí, veía al público, controlaba la noche, los tiempos y el cambio del personaje.
Recuerdo dándolo todo, como personaje borde, desde mi mesa de despacho en Los tipos de despidos, pero realmente me sentía muy encorsetado. Primero porque el traje me estaba muy justo, temía que saltara el botón del pantalón, y la petaca del micro andaba suelta en el interior del mismo y podía romperse. Y segundo porque era un texto muy similar y si no lo hacía bien, podía confundir a Juan y dejarlo vendido, así que iba cuadrado.
Mi sorpresa fue cuando en un momento de la escena que Juan estaba arrodillado y me acerco a él, se puso a improvisar. Me quedé un poco pillado, respondí pero encaucé rápidamente.
Trasladé al Pantalone de la Commedia dell`arte al inmobiliario usurero de Se queda sin su casa.
Como era un personaje estático y estirado, le pedí a Antonio, cambiarlo por el personaje del viejo tacaño del teatro italiano y aceptó. No sé si pegaba o no, pero yo lo disfruté como un niño chico, recuperando a este personaje después de años y haciendo lo que quería. Di hasta saltitos.
Luego venían mis figuraciones, una recogiendo cosas del suelo, nada que destacar, otra donde tenía el reto de decir "recalifique" fue todo un éxito porque no me trabé, como siempre, y en el de La hipoteca que hacía de aval. Un personaje estático, casi estatua que debía provocar risa.
Casi no lo había ensayado, pero hasta ese lo disfruté, pues me puse a hacer mucha gestualidad exagerada y notaba a la gente reaccionar según mis gestos. No me ponía nervioso estar de estatua porque entraba y salía con mucha frecuencia.
Y el último se llamaba El concurso, pero bien podría ser el del buen rollo. Era un sketch coral donde estábamos todos y lo pasamos genial. Antonio nos pidió pasarlo bien, dejarnos llevar y divertir al público. Y eso hicimos. En este sí que me dejé llevar, ¿Quizá me pude pasar de gestos, reacciones o energía? Lo mismo sí, casi seguro que sí, pero lo estaba pasando en grande y poniendo el colofón de oro a una tarde dura y una noche brillante.
Cuando tras la función Antonio, subió al trasero de la escenografía donde estábamos, si no llega a ser por las normas Covid, creo que nos hubiera comido a besos a todos. Venía eufórico, lleno de buen rollo y muy buena energía, que era lo que por lo visto, habíamos desprendido todos desde el escenario, o sea, se había cumplido el objetivo. No paraba de darnos las gracias
Yo os voy a confesar la verdad, estaba muy feliz y muy orgulloso por mi trabajo y por el cambio en cada uno de mis personajes. Es verdad que hubo cero retroalimentación por parte de todos, nadie me hizo ver que lo había notado, ni que me felicitaron por ello, ni todo lo contrario. Con lo cual, ¿o no se notó o no gustó?, pero ya digo no sé cuál sería la respuesta, pero a mí me encantaron y lo pasé genial. Suena muy egocéntrica esta reflexión, pero es real, me sentía satisfecho de mi trabajo.
Estreno de Mala Racha, miércoles 14 de julio del 2021. Campillos (Málaga).