UN SUEÑO LLAMADO RAFAEL.

Colegio, clases, programar clases, preparar repartos, organizar atrezo del festival de teatro, mandar Whatsapp,  limpiar la casa, gym, dieta, limpiar la casa, colegio, programar clases, organizar el  festival de teatro,  más clases, más cole, más festival,  todo esto ha llenado mi cabeza en estas ultimas semanas, días y  horas. En cambio en estos momentos, voy para mi casa, caminando y todo gracias a que Juampe  me ha acercado en coche, pues bien hace calor, parece pleno verano y repito voy caminando, pero en mi cabeza, ahora, hay otras ideas; tengo ganas de irme de fiesta o de tumbarme en la playa de noche, para ver las estrellas, de bañarme bajo el sol, tengo ganas de hacer cosas, cosas que por fín ya pueden ser divertidas y de verano. 

Hoy, viernes 10 de mayo del 2019, he interpretado a Rafael Echevarría en la pieza Un paseo por  el tiempo, en el botánico. He empezado a las 22:46 y para las 23:50 ya estaba listo. He estado trabajando poco más de una hora o incluso menos, no lo sé bien porque no he controlado mucho cuando acabé, además hubo un pequeño descanso, así que habrán sido 50 minutos de trabajo pero me han sentado como si hubiera estado un mes entero en Hawái de vacaciones.

Voy  relajadísimo,  satisfecho, me siento afortunado,  contento, tranquilo, voy paseando, caminando, disfrutando de todas estas sensaciones, y todo esto después de haber vivido, porque como me dijo mi amiga Gertru: “ Hoy no vas a disfrutar a Rafael Echevarría, sino que vas a vivirlo” y así ha sido Gertru, te prometo que no he actuado, ni he disfrutado, he vivido, pero tanto, ha sido tanta la desconexión de mi, para ser él, que como digo, estoy aun intentando volver a la rutina, aunque voy haciéndolo  poco a poco para no perder este estado de extasis y felicidad total.

Y dentro de este cumulo de sensaciones positivas, me siento agradecido a; Gertru por darme esa inyección de energía, al botánico por darme la oportunidad de  vivir este personaje y a Rafael Echevarría por dármelo todo.

Cuando volvía del “baño- camerino particular”, ya vestido con mi ropa y camino a la salida, pensaba en quién sería don Rafael Echevarría de verdad, cómo sería.

Tenemos información de él en los libros y  en documentos, tampoco mucha, ni muy detallada, no es un personaje muy conocido, pero sobre todo pensaba que ese  hombre no sabía, cuándo compró la finca, que casi 100 años después le iba a dar tanto a un actor malagueño y además, como dije antes, es un personaje muy desconocido en Málaga, por ello yo le he creado esa personalidad, seca, gruñona, algo fantasma, pero que en el fondo es muy simpático, entrañable y cae bien a todo el mundo, por eso, creo que esté donde esté ese hombre, estará contento y orgulloso de que se de esa imagen tan “ guay” de él.

Además para mí Rafael Echevarría es mi Rafael, con sus experiencias y recuerdos de vida ( que ya los tiene) con su olor a colonia de “dandi”, con su cuerpo adelantado, con su vestuario, su acento vasco, sus posturas, con su caminar con las manos detrás ( ¿ verdad Gertru?).... pero me decía a mí mismo: " El verdadero ¿ Qué pensaría de todo esto?."

Él era un hombre normal, del País Vasco, que tenía una casa en Málaga y nada más, pero actualmente para mí y para muchos es alguien muy especial, por ejemplo hoy mi madre me hablaba de su ropa así: " Sí eso lo usé el otro día para la ropa de Rafael Echevarría". No hablaba de mi vestuario sino de la ropa de él.

Es que este es un personaje que he creado  desde cero, que se ha enriquecido con los años, que no tiene nada que ver conmigo y además, es el que más he vivido y más he representado en mi trayectoria.

Ahora os voy a hacer una breve reseña de cada pase escrito en el momento post-pase:

Bueno antes debo deciros que hoy hemos actuado para el área de juventud, era algo organizado por el Ayuntamiento de Málaga, solo eran espectadores menores de 30 años, y como la dirección decidió prescindir del personaje de la ninfa, yo en vez de esperar al público en el paseo de las palmeras lo hacía donde la estatua de  ella, y entraba interrumpiendo en off, con cuatro frases cortas, la actuación de Juampe y este tras oírme huía. Pues bien, en los dos pases, que hemos hecho, nada más aparecer y saludar  al público, ha habido algún espectador que me ha dicho algo sobre mi origen vasco. Uno con un saludo en Euskera y otro hablando de la fortaleza de los vascos, por tanto, en pocas frases ya habían reconocido mi origen y mi acento y eso pues me ponía muy contento, sobre todo, porque el acento es mi prueba de fuego y si ya lo habían reconocido, solo me quedaba disfrutar.

Ahora sí el resumen post- pase:


1.- Calentando motores:

"Acabo de terminar el pase, espero de pie en la escalera el siguiente, no me puedo sentar  en un escalón porque me mancharía de barro, no puedo beber porque tengo lejos el botellín de agua, y ahora mismo tengo calor.

Es verdad, que con la verborrea que se gasta Don Rafael, ha habido momentos de silencio,  momentos donde hemos caminado y solo se oía el croar de las ranas,  pero es que el camino ahora es mucho más largo y no quería dar toda la información al principio y que luego me quedara corto. Además no pude improvisar mucho cuando iba por el camino de la ninfa, porque los jovenes no me daban mucho juego, pero he disfrutado, una vez más, lo he vivido pero quizás Rafael ha estado un poco más seco que otras veces. Era un recorrido nuevo, estaba oscuro, el publico era joven y me daba un poco de reparo soltar toda la filosofía antigua de Don Rafael, por si no era bien entendido y alguien se me indignaba, pero no ha pasado.

Eso sí, se notaba la juventud, porque andaban que se las pelaban y se han comido el camino en un plis-plas. Uno acostumbrado a las noches de verano, de calor, de cansancio y de visitantes de mayor edad, estos se han chupado el camino y a Don Rafael lo llevaban al trote.
Casi todos eran parejita, con lo cual no he podido jugar mucho con las señoritas que iban solas pero si he jugando con una pareja.

He dicho todo el texto del verano, aunque lo he cambiado de orden.  Se han oído risas desde el primer momento y estas han durado durante todo el trayecto, pero es verdad que eran pocos,  eran seriotes y Don Rafael estaba de estreno, todo era nuevo para él y tenía que adaptarse, pero ellos han disfrutado y yo también, así que perfecto, pero ha sido un pase de calentamiento o toma de contacto".

2.- Este si ha sido el pase de Don Rafael:

"Este ha sido vivido desde el segundo uno. Yo ya sabía como iba todo, ya lo controlaba, así que me fui a descansar y vigilar desde fuera, mientras Rafael se apoderaba de mí y salía a vivir y pasarlo bien.

Ya conocía lo que había gustado de la vez anterior y donde estuvieron los fallos, por ejemplo la voz en off, estuvo más segura, real y controlada, la presentación ya con el público, ya fue más elaborada, más realista y más relacionada con la voz en off, el público reía desde el mismo momento en que me oyeron y así fue durante todo el pase, bromeaban, reían y comentaban. Además, en mi salida, se colocaron muy bien, esto es, haciendo un semicírculo a mi alrededor, esto  facilitó, mucho más que en el pase anterior, el decir mi primer monólogo.  Después durante el camino hasta el paseo de las palmeras, no paré de hablar y de tener reacciones por parte del público.

Este era más numeroso y más vivo, así que me dio mucho más juego y se establecieron roles o perfiles que me permitió jugar todo el camino, como la chica que iba vestida con pantalón, los chicos que iban en pantalones cortos, la parejita de novios que iban demasiado agarrados, el matrimonio que por contra iban separados, el de la camisa de cuadros que quería ir el primero, el otro que se cansaba, el que se quería quedar solo en el Mirador, el otro que me seguía el rollo cuando alababa a los vascos y criticaba a los andaluces, etc. Eran unos 25 jóvenes y según recuerdo aquí, tuve trato, así más  personalizado y de bromas con unos 20, esto indica que eran muy divertidos, con ganas de pasarlo bien, muy enrollados y educados.

Eso sí este pase me demostró, que tengo experiencia y ya con solo ver las expresiones de las caras los veo venir, puesto que noté que ciertas personas  podrían ser de las que se indignan y por ello  apenas los metí en el juego, porque sabía que les podía molestar y al acabar me dijo, un compañero, que con sus comentarios se molestaron. ¡¡¡ Qué listo!!.

En el Paseo de las Palmeras el texto fluyó muy realista y el monologo lo viví. Después en la subida al Mirador, tiré de bromas y juegos, en el Mirador más monologo contado con realismo, la bajada y el camino de vuelta, a parte de breve porque lo bajaron corriendo, fue libre y totalmente improvisada, ellos me sacaban temas y yo de ahí realizaba una divertida conversación. 

Casi sin darme cuenta me encontré con Samu, me despedí de ellos, el pase se acababa y Rafael salía de mí para volver de nuevo yo y morirme de pena pues la jornada tocaba a su fin... Jo."