¡¡¡ ESTUDIANDO Y EN TODAS PARTES!!!

No solo de audiovisual vive el hombre, así que, había que salir de la ensoñación y seguir trabajando para el personaje de Personajes del María Cristina. 

Bueno antes de seguir tengo que aclararos, que ya puedo hablar abiertamente del nuevo proyecto de Eventos con historia del que os escribí y es el llamado Personajes del María Cristina que consistirá, Dios mediante, en unas visitas al conservatorio que lleva dicho nombre, donde a parte de conocer la historia del lugar, se podrá ver teatro de tú a tú con el público y degustar una pequeña merienda en  un marco incomparable. Ya os contaré más pero ahora sigamos con la historia.

Tenía previsto un paseo familiar para la tarde del sábado 15 de enero del 2022, pero como cuando salí de la grabación del video clip, comprobé que el cielo estaba negro y hacía un frio polar, así que decidí suspender ese paseo, darme una vuelta por el centro, alimentar un poco el cuerpo, con un dulcecito, y el alma con mis temas cofrade y volverme a casa, por cierto, que llegué a tiempo de ver Cine de barrio con la familia y lo pasé muy bien la verdad.

Pero mientras paseaba me estudié el resto del monólogo. Bueno, a decir verdad, como no tenía un personaje definido, ni  un texto que trabajar antes de la grabación del video clip, en el camino de ida fui también estudiando parte del monólogo.

Si no recuerdo mal, el sábado lo dejé íntegramente aprendido, pero eso sí lo hice de manera totalmente neutra, sin darle forma, sin interpretación, sin meterme en el personaje ni nada. 

Este es un personaje que desgasta mucho emocionalmente, por tanto, no se puede estar constantemente entrando y saliendo en él, además, necesita mucha atención, así que es bueno tenerlo aprendido a la perfección, para poder navegar por sus emociones, estar centrado en él y no tener la cabeza en el texto. 

El domingo 16 de enero del 2022, fue el día oficial del repaso, lo dediqué a repasar y a repetir el texto una y otra vez.

Qué iba a pasear con mi madre, antes de salir lo repasaba, que fregaba el suelo de la cocina tras el almuerzo, lo repasaba, que me lavaba los dientes antes de la siesta, pues lo repasaba, que subía a tender los trapos,  lo repasaba, así hasta no sé cuantas veces.

Y el lunes 17 de enero del 2022, que era el día del primer ensayo, fue un calco del día anterior, pues repetí el mismo modo operandi del domingo, o sea, cada vez que tenía un hueco libre me ponía a repasar el texto. Esto incluía el momento previo a dormir  y el de acabarme de levantar.

Ya digo es un personaje emocionalmente difícil, por tanto, no lo ensayé mucho, pero sí pensé posibles movimientos o gestos, pero tampoco muchos la verdad.