REFLEXIONES LOJEÑAS II.

"De nuevo estoy aquí, no ha sido un pase técnico.

 Ya está todo montado quedan tres horitas escasas.

Acabo de colocar a los títeres y útiles. Ahora estoy más nerviosillo. Álvaro y Juan están pasando textos de sus escenas más complicadas

.

 Mientras descanso y sigo contando cosas.

Durante el  viaje quería descansar  pero me han sentado delante junto a Chema y la verdad, al principio me ha dado un poco de corte, me han dejado con el dire, cuando ellos tienen más confianza con él, pero la verdad que me lo he  pasado muy bien. A un lado tenía a Rafa durmiendo y al otro a él,  hemos  ido hablando de teatro, experiencias, amigos en común  y visión del teatro.

En nada de tiempo hemos llegado a Loja y aun más pronto al teatro.

 Hemos esperado un poco a la puerta del teatro, por cierto, que el trasero del teatro, parece el norte y no Andalucía, mucho verde, muchas piedras, la torre de la Iglesia más importante de Loja, bajo el alcazaba, vamos una estampa preciosa, pero en ese momento, me he puesto un poco nervioso, no sé era todo muy nuevo.

Nos han abierto el teatro y se ha descargado.

El teatro me ha parecido esplendido y muy acogedor. Me he sentido muy bien ahí.

 Ayy estoy deseando empezar, ya,  a hacer algo. 

Tras eso, hemos ido a esperar a Álvaro, que se había adelantado a nuestra llegada, porque él es lojeño y porque en la furgoneta, no había sitio para todos.

El paseo hasta llegar a Álvaro, me ha parecido encantador, no estábamos en Andalucía, me repito, era el Madrid de los Asturias, las calles con escaleras, para salvar los desniveles, las casas señoriales, la plaza de piedra donde hemos esperado a Alvarito, ha me ha encantado dicho pueblo.

Ya con él, era más fácil moverse y nos ha llevado a desayunar, muy bien por cierto, un jamón ummmm.

Después el primer, gran momento del día la entrevista en la radio, nunca había estado en la radio. No me hacía especial gracias ir a la entrevista, pero una vez allí y con  la cortesía de su presentador, me he sentido súper bien.  

 Además estaba emocionado. No sé por qué pero tenía ganas de llorar. Hemos ensayado mucho.  En un ensayo, pues cada uno defiende su papel, su trabajo, etc., pero ahora éramos  todos juntos los que defendíamos nuestro producto y estábamos todos como un todo, defendiéndolo a capa y espada. Eramos una sola persona y sin trampa ni cartón todos a una de verdad, amistad y cariño enre todos  y eso me ha emocionado. 

Me lo he pasado genial. Hemos reído y estaba  súper relajado y feliz. 

Tras otro poco de turismo, llego la hora de la peregrinación al almuerzo, cuestas, sol, calor, escaleras, más cuestas y al final la recompensa el Atracón que cantidad de comer, buena comida, tallarines que saben a los de toda la vida y buena conversación. 

Otro paseíto, cafelito con charla muy divertida  y al teatro, a donde estoy ahora esperando."

( escrito el viernes 23 de octubre en el interior del teatro Imperial de Loja.)