MÁS Y MÁS Y MÁS MURALLAS.

Después de una tarde, emocionante, nostálgica, melancólica y muy feliz, junto a mi madre, mis antiguos compañeros de párvulo y mi siempre querida y admirada Señorita Ana, en el Ateneo de Málaga, donde esta ultima presentaba su libro Memoria de una maestra, autobiografia en la que  repasa toda su vida  junto a sus niños. Pues bien, después de pasarlo tan bien, mirar al pasado y desconectar de todo, me dispuse a un nuevo ensayo en las murallas del hotel La Posada.
Las ganas eran pocas, las concentración estaba por el mismo nivel, poca, pero llegué e hicimos el ensayo.
Fue, el miercoles 22 de octubre de 2014,  llegamos e hicimos un pase completo.
Estos ensayos más que ensayos son un puro tramite, es llegar, hacerlo y marcharnos.
Aunque reconozco que fue de los mejores ensayos que hemos tenido y de los más fluido,  debo decir que hay problemas importantes que saldar y a veces no se le da el tiempo suficiente para solucionarlo.
Pues lo dicho, llegamos, ensayamos, un pase completo, y a casa.
Antes de salir , Eduardo, nos habló sobre algunos proyectos pendientes y listo.
 Otro ensayo más....
Lo más destacable del día fue, que teníamos una espectadora de excepción, mi madre.
De nuevo la escena de Zumaquero y Luisa estuvo de diez, Ángeles estuvo para comérsela, pero la mia sigue floja y sin solución.