Era el día esperado, el más importante del Festival, el
jueves 28 de abril del 2016, día de la proyección de la película de oro y esta no era otra que Amantes de Vicente Aranda. Había leído, la
pasada semana, en el diario Sur, que Victoria Abril vendría al festival, así
que, blanco y en botella.
El jueves la gran Victoria Abril andaría por Málaga y yo
iría a acoso y derribo a por ella.
Solo como un perro, aban-
donado por mis compañeros de
festival, Alba, Álvaro y Juan que dormían la mona después de una noche de
fiesta festivalera que bien mereció la pena. Me presenté más muerto que vivo,
al pase de prensa del Teatro Cervantes.
Únicamente, fui al
Cervantes, con la ilusión de pillar el
programa de prensa y saber por dónde andaría Victoria Abril. Pero cuál fue mi
sorpresa, negativa al ver que no aparecía
por ninguna parte, o sea, que no venia
al festival.
Pero las sorpresa negativas no acaban aquí, entro a ver Propera pell, película catalana. Y en
las primeras escenas, la protagonista sale con gorra y bufanda. La llaman por teléfono
y se quita la bufanda y es Emma Suarez, una de mis actrices “menos favoritas” del cine español.
Con lo cual aguanté en el teatro el máximo de tiempo posible
y a la hora de película me dije: “Lolo
estás cansado, ahora debes de correr mucho para almorzar y llegar a las clases,
¿Qué te une a esto?”. Mi respuesta
fue: “nada” así que, me levanté y me fui.
Entre los subtítulos, la lentitud de la peli, las localizaciones y la
protagonista, me largué.
No vi entera una de las pelis más premiadas del festival.
Así soy yo.
La tarde no fue
mejor, influen-
ciado por mis compis, Álvaro
y Juan que me liaron para que no fuera a
ver Amantes y tras el curro, me fuera
con ellos al Albéniz, a ver el tráiler y la presentación de la nueva película de
Alex de la Iglesia, El bar.
Que también os debo
decir que este es uno de mis “menos
favoritos directores del cine español”, pero si soy sincero esa película, o al
menos esos cinco minutos que proyectaron tenían muy buena pinta.
Después la influencia, de nuevo, la mala influencia de Alba me lió para que me fuera a casa y no entrara a
una conferencia sobre la película Amantes,
la verdad, que tampoco tenía muchas ganas.
Así que un día muy regulera, la verdad que tampoco había
nada interesante que ver.
Eso sí el cansancio genera-
lizado se debía a que la noche antes, habíamos salido a una fiesta
organizada por cineastas malague-
ños, donde no había ni de lo uno, ni de lo
otro.
Salimos Alba, Álvaro, Juan
y yo, pero se unieron también, Adrian Vereda, Sara, periodista y ex compañera
de la ESAD, que siempre tuvo mucho filin conmigo, pero que jamás pensé que
podía ser tan divertida y gamberra y el reparto de la película Callback, a los que llevamos de parranda
por Málaga, mola relacionarse a nivel
personal, con colegas que están en otra escala.
Y la otra ulusión del día fue el abrazo que
recibí de Juan y de Álvaro, que grandes son, cuando me senté en el Albéniz
después de hablar por teléfono con el
director de Pata Teatro, donde me CITABA PARA UN CASTING EL PROXIMO MARTES. Qué ilusión, que nervios y que emoción.
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