miércoles, 17 de febrero de 2016
TRES CERVANTES EN UNO. LA ACTUACIÓN.
Pues si fueron tres Cervantes en uno, porque fueron tres pases los que hice de la pieza Monólogos de Cervantes.
El madrugón fue una burrada. Aun era de noche y como iba cargado con maleta, bolsa y mochila y debía recorrer todo el barrio, di muchas vueltas para llegar a Vialia.
Iba en el metro como un zombi, llevaba ganas y nervios a la vez, pero no paraba de mirar el reloj para no llegar tarde ni un segundo.
Llegué muy bien de hora a la cita con el profesor con el que me iba, pero el tiempo pasaba y el chico no llegaba y mi cabeza empezó a dar vueltas, quizá se había olvidado y ya no llegaría, lo llamaba y no respondía.
Ya era de día pero cada vez hacía más y más frio.
Llegó el chico y charlando amiga-
blemente nos fuimos a Fuengirola. Al llegar, tanto él como otro compañero, estuvieron pendientes a mí en un cien por cien, me ayudaron en todo y la verdad, que tuve material suficiente para que todo quedara bastante bonito.
Me maquillé lo preparé todo rápido y comenzaron los pases.
Fueron tres.
El primero, ha sido el más importante, en él estaba el profe que me recomendó, y puedo decir que ha sido el más catastrófico.
Aunque todo salió muy bien y tal cual lo había imaginado, pero Cervantes estaba menos pillado.
Eran los más pequeñines y como no sabía si funcionaría y no quería que se aburrieran, rápidamente Cervantes se metió entre los niños, para estar con ellos y dar más emoción. Me encantaban sus caras de alegría e ilusión, pero fue poco participativo.
El cuento de El licenciado vidriera, ha sido más serio y un poco flojo y la salida de Rinconete, a penas, ha contado nada y al sentarse en el suelo todos los niños se echaron sobre mi y fue un poco caótico, sobre todo, caótica fue la representación teatral de ellos de El viejo celoso.
El segundo, Cervantes se ha pasado mucho más tiempo sentado en su silla y jugando con su pluma y sus arreos de escribir, el personaje me ha salido mucho más mayor, se ha levantado cuando ha sido necesario mucho más justificado, además he estado mucho más participativo, haciendo que la historia la contemos entre todos, le he dado más valor al tema aventurero y los niños comentaban, estaban muy metido en la pieza. De hecho yo les pedía que me cantaran " cumpleaños feliz" pero no hizo falta pedirlo, ellos lo hicieron solos.
En El licenciado vidriera, lo he hecho mucho más participativo y rápido y los niños les han gustado más, aunque no paraban de acercarse a verme donde estaba escondido.
Rinconete ha sido mucho más jovial y más organizado ha hablado más del teatro y la representación de los niños de El viejo celoso ha quedado muy bien mucho más organizada y divertida.
El tercer, lo mejor fue que mientras los niños entraban, Cervantes estaba sentado solemne escribiendo en su papel y en su libro y la carne se me puso un poco de gallina, porque estaba metido al cien por cien y me sentía como en aquella época y entré en la actuación con toda la energía. Quizá fue el mejor, Cervantes se hizo amigo de los niños, El licenciado vidriera estuvo muy organizado y Rinconete, conquistó a los niños jugando y haciendo bromas con ellos y me encantó los niños haciendo El viejo celoso.
Acabé muy contento.
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Que bien caracterizado!! te ha quedado estupendamente.
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