jueves, 27 de junio de 2019

LO NUNCA VISTO EN SAN MIGUEL.


Hoy, jueves 27 de junio del 2019, era el día programado para el ensayo general de la primera Noche de verano en San Miguel, el planing era el siguiente; cita a las 19:00 horas e inicio del mismo a las 19:30. Se haría todo a tiempo real, así que yo, hasta cerca de las 21:00 no empezaría ya que hago el monologo final a la puerta de la capilla y donde se unen todos los grupos.

Pues  ha ocurrido algo inaudito en el cementerio. Asustado estaba y se lo hice saber a mis compañeros, especialmente a Juanjo, con el que tengo más confianza. Le dije :” Juanjo algo va a salir mal porque lo de hoy es lo nunca visto aquí”.

Y es que llegué al cementerio antes de la hora de la cita y me vestí el primero.

Salí un poco retrasado de casa, pues estuve jugando y aprovechando al máximo el tiempo con mi sobrina, pero pese a eso iba muy bien de hora, eso sí, el traslado al cementerio ha sido horrible.

Como después del ensayo no iba a casa, no quise llevar ni mochila, ni gafas de sol, ni porta trajes y por ello llevaba colgado al hombro, la bolsa con mis efectos personales, con mi sombreo, mi calzado y mis complementos y en la mano una percha con la camisa, el chaleco y el pantalón, que por cierto se chorraba de la percha y para que no se cayera lo llevaba agarrado con la mano, eso unido a que me daba el sol de cara, sin las gafas, calor y que iba rápido…

Ha sido un viaje de todo menos agradable, menos mal que en la plaza de Capuchinos me encontré a Edu, María José y otra  chica que iban en su coche y me invitaron a subir con ellos, por esa causa llegué tan pronto y pude hacer el ultimo trayecto sentado y con aire acondicionado.

Llegué y tras un pequeño saludo, el guardia nos abrió la “ sala duelo- camerino” y entré. Tras coger una silla, empecé a vestirme, me acompañaba Pablo, pero de pronto él se fue y me quedé solo. Cuando entró Pablo y llegaron los compañeros como Adri y Juanjo yo ya estaba casi vestido.

Por eso comentaba Juanjo: “ ¿ Qué ocurre hoy que yo soy siempre el primero en vestirme y hoy estáis vestidos todos menos yo?”. Y yo le respondía eso, que debía ser él fin del mundo porque no solo él no estaba vestido sino que yo había sido el primero en llegar y vestirme cuando por norma suelo ser el último.

O era un presagio del fin del mundo o subconscientemente me pudo la responsabilidad, os cuento:

El planing era lo que os conté antes, pero la compañera que actúa conmigo, realizando un baile con otro chico, pidió que se hiciera primero nuestra parte y después lo demás puesto que ella sobre las 20:00 tenía que irse a trabajar, así que creo que me pudo la responsabilidad de no hacerla esperar ni un segundo.

Nos vestimos todos, yo ayudo a  poner la pajarita a Pablo, Pablo a mí y yo a Juanjo. A continuación Juanjo me hace fotos, yo a él y nos salimos fuera.

En el exterior reina la paz, el buen rollo y en mi cabeza el mareo, puesto que las gafas de mi personaje son graduadas y veía como si estuviera en el fondo del mar, todo se movía.

Esperamos, hasta que pregunto la hora, me dicen que son las 19:33 y ahí no pasaba nada. El chico que baila con la chica hoy no puede venir, ella se va a las 20:00, ya han pasado las 19:30, la chica tiene prisa y yo me quiero ir.

Cuando vuelve Edu de soltar una bandera en un lugar del cementerio, le pido empezar, él pide silencio y empezamos el ensayo general:

Crónica en la próxima entrada.

1 comentario:

  1. ¿A ti no te gusta el veranillo y su sol? Pues a disfrutarlo con salud.

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