Son las 19:24 y ya voy en el bus.Desde que estoy aquí han pasado dos del número "17" y uno del " 20" y por último el "2", o sea, el mio.
Siempre se repite lo mismo, pasan estos autobuses y al final el mio. Lo que no sé es por qué yo me desespero, mientras espero, si se lo que hay.
Pues os diré me desespero por dos cosas: Primero, en esta parada no hay pantalla con el tiempo que falta para llegar el bus y segundo, y como digo siempre, en esta parada, hace mucho calor, no hay sombra y el sol pega con justicia. Eso sí hoy, solo hacía 80 grados, no 120 como la semana anterior.

Hoy, jueves 24 de agosto del 2017, de nuevo el marques de la casa de Loring va en bus a la finca, porque mis papás no pueden traerme. Esta vez nos es debido a un viaje, sino por desgracia a un problema de salud, no muy importante, gracias a Dios, de un familiar.

Ya os contaré. Ahora voy a oír música y descansar. Otra vez tengo sueño.
Mientras caminaba para el bus venía pensando en las personas que la semana pasada perdieron la vida en Barcelona. Esos sí que ya no tienen preocupaciones laborales. Yo en cambio sí, por eso he pensado que soy un desagradecido, por ir "tan" preocupado en tonterias. Soy un afortunado y no quiero comerme la cabeza en ese tema profesional, quiero vivir y pasarlo bien. Por esa razón hay un 99% de saber que la solución al dilema profesional sea un "no".
Después, me fui caminando y oyendo música hasta el jardín donde llegué sobre las 20:00. Perfecto.
Después, me fui caminando y oyendo música hasta el jardín donde llegué sobre las 20:00. Perfecto.
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