EL DULCE CAMINO DE ARLEQUIN.

Cuando me levanté del sofá, después de la siesta, para vestirme, encaminarme al antiguo conservatorio María Cristina y realizar una visita teatralizada con Eventos con historia, siendo mi personaje de Arlequín, ¿ Qué me preocupaba?

¿Llegar a tiempo? No, porque sabía que controlaba e iba bien. 

 ¿No entretenerme mucho? No, porque hoy me maquillaban allí. Qué alegría, solo era vestirme, coger el vestuario, que era poco, e irme.

¿Nervios porque iba a actuar? No para nada, eso estaba chupado. 

¿ Preocupación o responsabilidad por si el texto o el personaje salían mal? Tampoco, porque ese personaje no sólo lo controlo sino que me encanta hacerlo. 

Mi única preocupación era llegar a la zona con antelación suficiente para tomarme un blanco y negro. Si incluso antes de salir de casa organicé un plan con mi madre, por dónde tirar que fuera más corto y  no me viera ningún compañero porque sino no podría tomarlo. 

En mi cabeza solo estaba la palabra Blanco y negro.

B L A N C O Y N E G R O.

Y lo conseguí, pero eso sí un poco forzado, un poco encabezonado. 

Todo iba muy bien pero no sé el qué pasó, que como siempre,  me atrasé un poquito. ¿ Sería las fotos que hice  para Instagram?, ¿ El vídeo que grabé para esta red social? No lo sé, pero que una persona más coherente,  se hubiera ido directamente al conservatorio y yo callejeé y me fui a la famosa heladería sí lo sé.

No había mucha gente. La vez anterior que actué, en dicho lugar, me tomé el blanco y negro en la barra. Esto te da más aspecto de rapidez, pero esta vez estaba llena y lo tuve que tomar en una mesa. 

Me parecía una desvergüenza, pero lo hice. Eso sí lo pedí y pagué antes de sentarme, no tardó mucho y pude disfrutar mi momento. 

Cómo dije, iba justo. Mi cita para maquillarme, con lo cual no debía tardar, pues me esperaban, era a las 17: 30 y tomándome el último buche del maravilloso helado eran las 17:32.

Ya iba mal pero la distancia era muy poca. Mi amigo Google Maps me decía que estaba a 290 metros, que traducido en minutos eran 4 caminado. 

Terminé, salí, corrí y casi sin saludar, entré al antiguo conservatorio, evitando así que los de la puerta me pararan y retrasaran más mi entrada. 

Fui abriendo puertas, sin mirar a los lados hasta entré al auditorio del local. Ufff había llegado. 

Ya podía comenzar el previo. 

Málaga, viernes 4 de octubre 2024.