¡¡ QUÉ TRABAJO DE ENSAYO!!!.

 

¡¡¡ Qué trabajo!!! Dice el título de esta entrada, aunque debería ser: ¡¡ Qué poca vergüenza!! o más bien que poco trabajo.

Lo del trabajo es porque me cuesta mucho escribir esta entrada, porque no sé qué contar que no quede muy feo, todo lo que cuente es negativo y no porque el ensayo de El convidado de piedra lo fuera, sino porque mi participación en el mismo si lo fue, de nuevo lo único destacable de mí actuación fue falta de trabajo.

No sé por qué, pero  había algo en este texto que no me enganchaba, que me desmotivaba a estudiar y no veía atractivo en el personaje.

Bueno, este era el día que me había planeado como el de demostrar, de dar el golpe sorpresa.

Ya el acto 1 y 2 estaban afianzados, durante el ensayo leería el 3 y 4, para darle a Edu el anteriormente mencionado golpe de sorpresa con el acto 5 que me lo sabía de memoria, bien y matizado. 

Pues no, nada más lejos de la realidad. 

En el primer y segundo acto me sentí inseguro porque no sabía muy bien los pies del compañero y al dejarme llevar me perdí mucho.

Los actos siguientes, 3 y 4, los leí y aunque era el segundo ensayo donde leía, fue una lectura tan mala como la semana anterior, o peor. No sabía ni que decía, ni que leía. 

Y llegó mi momento, el acto 5. Ese sí me lo sabía, era mi sorpresa a Edu y me iba a lucir. Pues tampoco. 

De nuevo no me sabia los pies y en las escenas donde éramos más de uno, aquello era un caos, no sabía ni dónde ir, ni qué decir, ni cuando me tocaba. ¡¡ Qué mal!!!.

Y la sexta pues más de lo mismo, más lectura, sin sentido y sin saber ni lo que hacía. 

¡¡ Qué vergüenza en cada escena!!. ¡¡ Qué ganas de acabar!!. ¡¡ Qué irresponsable eres!! Todo eso decía mi cabeza. 

De nuevo fue un ensayo, largo, por varios motivos: Porque la obra en sí era larga, porque como había actores y actrices del elenco que no vinieron al ensayo anterior, sus apariciones tuvieron que volver a ser explicadas y retrasaba todo. 

A parte de los que se olvidaban o los parones, necesarios para explicar cosas.

El ensayo fue muy largo, más de 3 horas. 

Al acabar y antes de irnos hubo una charla final que se me hizo muy, muy, muy larga. 

Encima, Melisa no vino y las únicas fotos que puedo ofrecer son estas. Nada bonitas. Y aunque suene pesado, tampoco estaba personalmente con muchos ánimos. 

Málaga, domingo 13 de octubre de 2024.