Lo esencial que quiero y puedo recordar de este primer día de ensayo de Doña Francisquita es la calor.
La calor que he pasado tan grande en todo momento. Cuando dejé el metro en la parada de Princesa- Huelin, y me dirigía al lugar de ensayo el sol era horroroso. ¡¡Cómo picaba!! Parecía que te acercaban algo caliente a la piel y después, la sala, donde no podía hacer más calor, sin aire, ni ventilador. Se respiraba un aire sofocante, parecía que estábamos en el pueblo de Bernarda Alba. ¡¡¡ Dios!!.Ahora eso sí el local que tiene el teatro Cervantes para ensayar en el polígono Ronda Exterior es impresionante. En ese camino desértico rodeado de campo seco, naves viejas y abandonadas, llego a una impoluta, blanca, donde en letras azules pone " Teatro Cervantes". Entro.
Fui el segundo en llegar, pero cuando entré solo estaba el ayudante de regiduría eran las 16:45.
Cuando vi esa inmensa nave, limpísima, también blanca y al fondo todo negro como un aula de la Escuela de Arte Dramático. Ensayar en un auténtico local de ensayo con sus espejos, con el techo, las paredes y el suelo de madera negra es un lujo. ¡¡¡ Impresionante!!!. Te hace sentir más profesional, pero te genera más responsabilidad.
Poco a poco han ido llegando los compañeros ( se conocían casi todos entre ellos) y puntuales, hemos empezado. La salida se ha adelantado 20 minutos a lo previsto, pero porque hicimos el descanso más corto, por mí muy bien.Y ¿ Cómo resumo este primer día? Pues repito, calor y reparto del papel.
Solo uno, en la última figuración que hice para la opera Carmen, todos hacíamos como 4 o 5 papeles diferentes, metidos en bullas, aunque recuerdo que a mí me adelantaron en 2 momentos, en una estaba solo en el escenario y en otra me enfrentaba al prota. Aquí por el contrario cada uno tiene su propio personaje.
El mio lo han definido como muy solemne y reverencial, tengo mi propio negocio, que está en el lateral izquierdo de la escenografía. Un negocio muy refinado.
Suena bien, pero es verdad que tengo poca participación y casi nunca interactuo. Quizás esperaba un poco más, pero bueno aunque suene mal, tengo menos responsabilidad, menos trabajo y el mismo resultado.
Me he llevado una muy grata impresión al ver que el segundo director de escena es la misma persona que me dirigió en Carmen y tambien he coincidido con una muchacha de allí, que ha sido con la que más he hablado. Además estoy con un peso gordo del teatro malagueño, Miguel Guardiola. ¡¡ Qué ganas tenía de encontrarme con él !!! aunque no tengamos ninguna intervención juntos.Muy grato ha sido también el hecho de que solo somos 11 figurantes, con lo cual no nos han elegido porque había que meter mucha gente sino porque por algo nos han querido a nosotros.
¡¡¡ Ay gracias a Dios!! porque hay parte de la figuración que actúan en unos balcones donde yo no tengo que subir.
¿ Qué más hemos hecho? Decir que personaje sale en cada escena del cuadro I, e ir marcando los movimientos en estas. Cuándo sales, dónde te pones, dónde vas, cuándo entras, tu atrezo, tu actividad etc. Como bien ha dicho el director está pintando con un pincel del 15 o sea, a lo gordo y sin detalles, todas eran indicaciones logísticas aún no artísticas.
Yo por ahora salgo en 2 escenas del cuadro I ( una me dijeron que no salía pero salgo) y en 2 del cuadro II ( en mitad de esa segunda escena del cuadro II nos hemos quedado. Mañana más) ya digo, son apariciones muy breves y sencillas.Un trabajo un poco tedioso, así han definido el trabajo de hoy, es verdad que lo era pero tenía tantas ganas y era tan bonito ver a 11 personas, con nuestras piernas cruzadas, en sillas puestas en semicírculo y escribiendo. En un local negro, frente a nosotros la mesa del director dando vueltas al libreto, la mesa de sonido. Todo muy profesional que a mí no se me ha hecho pesado, estaba súper concentrado, lo apuntaba todo en una libretilla, no he mirado el móvil ni un momento, no me hacía falta, pero si tenía calor.
Nos espera un trabajo duro. Es mucho más difícil que Carmen, en esa ocasión éramos masa y si fallabas no se notaba, ahora tienes cosas muy concretas y si fallas se ve. Además todo debe estar muy súper cuadrado con la música, midiendo tiempos y yo para eso soy nefasto.
Oyendo música me marcho caminando a casa. Mañana más.
Martes 12 de septiembre del 2023.
Pues la fachada mas cutre no puede ser, no?
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