Estoy en un bar, escribiendo en el blog y esperando que me traigan el primer plato, porra.
Este bar me está llenando la cabeza de recuerdos, de
recuerdos de mi época en la ESAD. Porque hoy, viernes 28 de octubre del 2016,
ensayo con Alba en la ESAD. Después de
dar clases, me he venido a comer directamente a Teatinos y ya estoy por
aquí cerca.
Como digo, estoy recordando mi época de estudiante, pero la
verdad que con cero, vamos con
ninguna, añoranza. Quizá la que echo más
de menos o más flash me vienen a la cabeza es de Sarita, debido a todos los
almuerzos y confidencias que hemos compartidos.
Y ya que estamos recordando, voy a recordar como en estos
días hemos ido amueblando la casa de Lola con todo Lo que Lola quiera.
No os creáis que hemos parado de ensayar o estoy metido en uno de
esos proyectos, donde prefiero no hablar, para no contar ciertas
"cosas", para nada. Pero es con el ordenador roto no he podido
escribir y como han sido tantos ensayos los que hemos hecho, que ponerme ahora
a contar uno a uno a toro pasado es una tontería. Además de ser muy pesado y complicado...así que voy a resumir,
pero como sabéis sintetizando soy malo,
muy malo.
El primer ensayo, tras la rotura del ordenador y del que
tengo mejor recuerdo de todos los que hemos hecho, ha sido sin lugar a dudas, el celebrado el lunes, 17
de octubre, en la azotea de casa. Empezamos a llenar la pieza de detalles,
comenzamos a trabajar una vez pasados
los monólogos iniciales y la verdad que quedó de lujo. Al principio
íbamos un poco más tensos, marcando... pero luego empezamos a dejarnos llevar y
la pieza y el ensayo se llenó de vida. Fuimos incorporando muchos matices,
dándole detalles y gestos que enriquecieron mucho más la pieza. Le dio mucha
más vida. Yo ese día acabé con ganas de seguir ensayando mucho, pero que mucho
más. Ese día solo decoramos una habitación pero quedó de lujo.
Al día siguiente quedamos, íbamos más justo de
tiempo pero pudimos pulir una escena
más. Donde, por cierto , arreglamos un
chiste que cojeaba un poco y al final quedó perfecto. Cada vez tenía, todo,
mucho más sentido y la casa se iba amueblando con lógica y mucho gusto.
Tanta decoración nos pasó factura y el miércoles, 19 de octubre, aunque repasamos, no fue mucho, el cansancio y demás hizo de
nos dedicaremos a ordenar y programar cosas.
Pero el jueves 20, y debido a que venían cuatro días sin ensayos, nos dimos el palizón.
Repetimos tres escenas, tal cual lo habíamos programado el día antes y
repasamos el resto. Si es verdad, que estas escenas eran muy parecidas a la
versión original y el montaje de las
mismas quedó muy limpio desde el principio. Por tanto, hicimos poco trabajo de enriquecimiento.
Y tras estos cuatro días de separación. El martes 25 de
octubre volvimos a la carga con machaque y ensayos de escenas. Ese día mi Alba y no mi jefa, se mostró muy tierna y
humana conmigo. Ay la jefa que se me confiesa.
Y por ahora, acabamos la etapa de ensayos en mi casa, el
miércoles 26 de octubre con el montaje
de la última escena, repaso de texto y limpieza de algunas habitaciones ya
amuebladas, o sea, escenas.
Pues ya está la casa completamente amueblada, nos han
quedado habitaciones más vacías, otras más minimalistas, pero otras, la mayoría,
que vamos no le faltan un detalle. Por tanto, en conjunto tenemos una gran
casa.
Ahora queda habitarla, adaptarla a nosotros, esto es hacer
muchos pases completos y hacerla más nuestra aun.
El ensayo de ayer jueves 27 de octubre, como el de hoy,
viernes 28 de octubre, son en la ESAD pero de ellos ya os hablaré más adelante.
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