viernes, 17 de agosto de 2018

EL MAL SABOR DE BOCA JAMÁS CONTADO.


Hoy la noche ha sido como la de ayer, pero al revés. Hoy el primer pase fue el bueno y el segundo el muy malo y esto hace que te vayas a casa con mal cuerpo.

Ayer empezamos mal, remontamos en el segundo pase y me fui eufórico. Hoy como ha sido al revés, acabé de bajón y me he ido con el bajón a casa, pero mañana comienzo otros cinco días de mini vacaciones y lo siento, pero no voy a pensar nada en teatro.

Sí ayer tenía presión porque venía Nora.  Hoy, a última hora, me he enterado que también venía, pero esta vez me daba igual.

El personaje de Rafael tiene que vivir, me hacía ilusión que lo viera y tenía miedo por si salía mal, pero con Jorge Loring me daba igual. Como siempre digo, este personaje está encorsetado  a un texto, unas acciones y un movimiento. Hay días que sale mejor y más natural  y otros peor, con lo cual hoy no tenía ni miedo, ni presión, porque saldría mejor o peor pero saldría bien. Si seguís leyendo veréis como todo cambió.

Dos pases hemos hecho hoy, jueves 16 de agosto de 2018, día en el que Madonna cumple 60 años. Dos pases de La historia jamás contada  y estas son las crónicas post-pase:



1.- MUY CHULO:


He visto fallos en la realización, pero mientras subía  las escaleras de la Casa-palacio, para empezar el siguiente pase, lo que me llegaba a mi cabeza era: ¡ Qué chulo!. Ha sido un pase chulo, limpio, bonito y con un humor blanco.

Quizas  he visto a un Loring más teatralizado que nunca, se movía mucho, estaba como un poco ridiculizado y por ahí nunca ha ido. Era muy exagerado en todo, muy de cuento infantil, empecé así en el balcón y así fue todo el pase. ¿Por qué? Ni idea. 

Antes de seguir, quiero destacar que hoy con Úrsula he disfrutado mucho. Me sorprende como nos sincronizamos ¡Es la leche ! y como lo cuadramos todo, sobre todo las intervenciones de uno u otro, sin hablar previamente, sin pactarlo  y  sin ensayar. 

Empecé, como siempre, hablando desde el balcón, fue bien, pero ahí comencé a exagerar al personaje y ya no paré. Miré muy poco al público y cambié el texto
.

Abajo, con Vanesa, muy bien.  Aunque hablando yo solo, como siempre. Ahí seguí exagerando al personaje. La canción prefecta, pues todos cantaron, además al acabar hubo muchos aplausos.

Luego, en las primeras bromas sutiles del pregón las risas fueron constantes. En el momento esperado no solo hubo "olé" sino que también hubo palmas. Durante el  pregón hubo mucha atención.

Mientras leía el pregón busqué personas para usarlas en la primera broma y no encontré quien me cuadrara, así que las elegí de forma improvisada, y creo que eso hizo que se perdiera naturalidad, pese a ello, a las personas la broma le encantó e incluso la aplaudió.  Al improvisar, me lié un poco con el texto, dije la esencia, quedó natural, pero no dije el texto literal que digo semanalmente.


El problema, muy bien, el público muy motivado e incentivado. Lo dije muy contento, me gustó, pero se colocaron mal y noté que al llegar al clímax, les daba la espalda. Me puse nervioso y de nuevo no dije el texto tal cual lo hago semanalmente. Al no decirlo de corrido y cambiar palabras perdí el ritmo, además me subí muy pronto y creo que quedó falsillo, pero la gente se rió y mucho. Tras el climax, muchas risas y compresión y con Úrsula, ya dije, hoy perfecto.

Aplausos al final. Está muy chulo estar tumbado, quieto y a tu bola pero oír los aplausos y sentirte orgulloso del trabajo

Buen pase y buen público, eran muy apañados, pues lo reían todo.




2.- LA NOCHE SE TRUNCÓ:


Hoy, el segundo pase lo esperaba con ganas , ya que después podría irme con mis amigos y comenzaban las minis vacaciones. Nora venía ahora y no me daba ningún miedo, porque todo estaba muy controlado y  muy especificado. Como dije antes, saldría mejor  o peor pero saldría bien, puesto que todo estaba muy preparado. Pero lo que no esperaba, era que en el  grupo vinieran dos niñas que me podrían estropear todo el pase.  Han comenzado  a hablar en cuanto yo he entrado en la sala y hasta que no he terminado toda mi parte, no han callado. Ha sido una voz constante, pero no un grito con mala educación, sino  toda una conversación que ha durado los 15 minutos que dura mi actuación. Ellas hablaban con su padre a un volumen normal, con lo cual, llegó un momento en el que hasta yo, me estaba perdiendo en lo que estaba diciendo , si fue así para mí, imaginaros el público que oían dos conversaciones a la vez.


De nuevo mi compañera Vanesa me llamó, desde el patio, acompañada de un grupo de niños. Debo decirle que quite eso, porque si yo no me doy cuenta de que están los invitados hasta que ella me los señala, si  la oigo  gritar junto a los niños, es lógico que ya sepa que hay más gente en casa ¿no? e ignorarlo es algo muy irreal. Debido a eso me sentí raro y  hasta coloqué mal alguna "s".

Ya abajo con Vanesa, bien, pero solo hablaba yo. La canción ha sido un gran fracaso, pues no me acompañó nadie, solo una señora, al final le aplaudieron, pero para mi fue un fracaso, pues esa unidad que siempre se genera no pudo verla Nora .  A continuación vino la broma con Vanesa, quedó bien, pero no lo suficientemente bien como queda otros días.

Y después empezó mi discurso y en cuanto empecé, estas niñas ya  comenzaron a  hablar, y ya todo ha sido un desbarajuste, era intentar elevar la voz sobre ellas pero casi no lo conseguí.

Tras eso, vino el momento del juego, donde la gente se rió pero no estaban muy dispuestos a jugar y eso también me desilusionó. Toda conexión con el público salía mal, por ejemplo, vi como me rechazaban y cuando los hice pasar al salón no se movieron.

Ya en el salón conté mi problema, pero igual, no estaban muy en la labor de empatizar y cuando llegué al clímax, los niños se asustaron literalmente y el público no se rió.

Con el hada todo muy neutro, porque debía hacer la broma final a una niña muy pequeña y no quise asustarla. Al final aplausos y no sé por qué.

Nora llevaba cara de sonrisa eterna, pero  la sonrisa no parecía real yo sabía que no lo estaba pasando bien. Este personaje, como siempre digo, está más encorsetado, pero si el público le apoya se engrandece, pero cuando el público no le apoya nada, el personaje se pierde, y eso ha pasado hoy.

Al salir a la calle, Nora, me saludó con un "esta bien" y eso nada tiene que ver con el abrazo y la enhorabuena sincera y  con orgullo de ayer, su gesto era de "no ha estado bien" pero es que realmente el pase, el personaje y todo, no ha estado bien.





Hoy acabo esta entrada con algo que nunca he mostrado y es el careto de parte del elenco, tras actuar y mientras esperamos, escondidos, a que Úrsula y Dani acaben su actuación:




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