Hemos llegado al teatro,pero en todos había un desanimo generalizado, como si no pudiéramos tirar del proyecto.
Hemos llegado y el telón estaba cerrado y aquello ya nos ha parecido un mundo, algunos miembros del equipo me han preguntado si estrenábamos el Viernes o no, y yo muy optimista y seguro de todo siempre he dicho que si.Pero cuando ha llegado el momento de iniciar el ensayo general, al no tener la escenografía real que vamos a usar y sentirme un poco descolocado, me he puesto muy nervioso, me he dado cuenta que debería haber calentado el personaje y no lo hice, con lo cual no empecé con muy buen pie.
A medida que la obra avanzaba me ido calentando pero el resto del equipo se ha ido enfriando y ha llegado un momento en el que ninguno teníamos la ilusión de un estreno, ha habido partes donde ha faltado texto, donde se han hecho parte que parecían improvisaciones de clase y poco a poco la obra ha ido muriendo, todo lo que habíamos metido nuevo necesitaba obligatoriamente mucho más ensayos, entonces me di cuenta que aquello no funcionaba bien.
Tras acabar la representación nos hemos reunidos todos y Leti, amiga de María que ha venido a vernos, y la verdad que la que más hablado ha sido ella, pero todo lo que ha dicho es totalmente cierto y la verdad, pero claro esas confidencia las guardo para nosotros.
Sobre las siete hemos salido del ensayo, aun con menos ánimos que antes, y cada uno a casa, mañana más.
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