martes, 28 de diciembre de 2021

DOBLETE VII: LARGA Y EXTRAÑA NOCHE EN EL BOTÁNICO.


El jueves 19 de agosto del 2021, la visita teatralizada El origen, volvió a llevarse a cabo en el Jardín Botánico de Málaga. Cuatro pases realizamos. De los cuales estas son sus crónicas:


1.- Sosos, sosos, sosos ...:


"Y sigo repitiéndolo, sosos, sosos, sosos y sosos. 

El pase se inició, como siempre,  junto a la araucaria. Llegué con toda mi energía positiva y mis ganas. Comencé el texto, pero no había ningún tipo de conexión con nadie. Este es un lugar oscuro y al ver al público tan quieto y erecto, me costaba diferenciar los  troncos de arboles de las personas. Era frustrante, buscaba la mirada de alguien pero eran fríos como témpanos.

Inicié el camino, pero por más que intentaba hablar o sacarles temas, no respondían. Fue entonces donde me rendí y dije: " Lolo di lo pactado, el texto tal cual y pasa de bromas o chistes". Pero fue en ese momento cuando entramos en el paseo de las palmeras  y vi que en ese grupo venía Natalia, mi hermanita teatral, así que por respeto a ella, no podía abandonar el barco, seguí e hice el pase como  siempre, cargado de comentarios, bromas e interactuación, aunque era yo solo el que hablaba. La gente iba a lo suyo.

Me costó un montón hacerlo, no sabía como tirar de ellos, se me hizo eterno. A veces alguno comentaba algo de lo que yo decía pero poco. Ya en la última parte, una señora me siguió un poco el rollo, pude hablar con ella y jugar pero casi nada. En cambio el resto nada de nada. ¡¡ Qué personas más sosas.!!"



2.- Mucho mejor, pero no arrancamos:


"El segundo pase ha estado mejor, mucho mejor que el primero, era difícil que fuera peor, pero solo una pizca mejor, muy, muy poco, tampoco ha sido para tirar cohetes.

El público era un pelín más agradable, tenían más sentido del humor, pero no las ganas de cachondeo que normalmente suelen tener, o que mi personaje les genera.

Ese inicio junto a la gran araucaria, en semi oscuridad, el público rodeándome y yo, de nuevo, en medio, hablando y viendo caras de indiferencia. Todo sucedía calcado al pase anterior, de nuevo el mismo martirio, no me lo podía creer. Menos mal que luego más adelante reaccionaron. Me costó, me costó mucho arrancarlos, porque eran un pelín serios, pero esta vez lo logré, con mucho esfuerzo, pero lo logré. Menos mal.  Eso me hizo acabar muy contento con respecto al pase anterior, pero estaba a años luz de los días anteriores.

Muchos de ellos se conocían, eran como medio familia, pero ya digo mucho mejores que el anterior. No eran muy gamberros como a mí me gustan, pero sí más abiertos y divertidos. Había una mujer se reía mucho de todo lo que yo decía, otras personas muy pendiente a mí, un niño muy gracioso y una pequeña a la que le di mucha caña.

Pero sobre todo me encantó y quiero dedicar una parte de esta entrada a un matrimonio. Eran muy mayores. El marido a veces, no podía e iba su ritmo, pero la mujer era una valiente, pues lo andaba todo, sola, sin ayuda y con muchas fuerzas y energías. Eran un ejemplo a seguir.

Al final, hubo buen rollo y filin, pero no me hice realmente "amigo" de nadie y acabamos un poco frío, o sea, no como suelo acabar, sino que me despedí y fin."




3.- ¿ El pase estrella?  Lo dudo:


Llevaba esperando este pase, varios días, es más todo lo que había hecho durante este doblete, estaba encaminado o dedicado a este momento. Puedo decir y que nadie se ofenda, que Pablo Alacaida y Rafael Echevarría, son los dos personajes que más he disfrutado y con los que  más me he divertido en mi vida.

Y hoy venían grandes amigos a verme. Yo quería hacerlos disfrutar, que vieran a Rafael en todo su apogeo. Deseaba llegar a ese pase lo suficientemente caliente como para que todo fluyera solo.

Pero después de los 2 pases anteriores tan fríos ( cosa que jamás me había pasado en tantos años) Rafael no solo empezaba frío, sino además inseguro y con miedo a volver a repetir ese martirio.

Más que la seguridad y la chulería del personaje que me ayudarían a hacer que se lo pasarán bomba, tenía el miedo del no saber y de que de nuevo me vieran sufrir un pase como los anteriores.
 
La verdad, que no tengo un gran recuerdo del mismo. Había un niño, bueno ya un adolescente, bastante "graciosillo" y su padre que le acompañaba en las bromas, al que tuve que ignorar desde el minuto 1 del pase, para así evitar acabar como el rosario de la Aurora.

Y aunque al día siguiente, todos me escribieron que lo habían pasado genial, yo no estaba contento, no me sentía a gusto, no sentí al personaje vivo. Fue una sensación rara. Pues quería que vieran a Rafael en acción, pero el público no me dio bola. Ya digo fue una sensación rara, no acabé muy feliz del pase. Es más, una de mis conocidas me rectificó una de mis frases, pues dije algo como que los pobres debían ayudar a los ricos. 

No quería abusar de mis amigos y sacar todos los chistes en base a ellos. Pero mi amiga Gema, no tenía muy clara la historia y al oírla comentar me metí con ella y ya no la dejé en todo el camino, la pobre. Pero eso sí al final ella me hizo una broma que fue genial. 

Creo que quise dar tanto y hacer un pase tan especial, que la presión ganó a la diversión.
 


4.- Pues al final sí :


Sí, después de tanto curro pude vivir aquello que llevaba todo el día esperando y  no era nada más y nada menos que pasar una noche inolvidable en el jardín, algo que pasa todas las noche pero que esta se hizo rogar.

Este sí fue como debe ser, o sea, gamberro, divertido, abierto, vivo, una fiesta, no sé si porque el público era de 10, que lo era, o porque yo ya no tenía ni la ansiedad de los 2 primeros pases, pensando que venían mis amigos, ni la presión de hacerlo bien y ser divertido que tenía en el tercero, ahora no había nada que demostrar, solo había que como siempre, dejarme llevar, oír lo que pasaba a mi alrededor y responder. 

Lo hice y fue un paseo agradable, todo fluyó de una manera maravillosa y el gran Rafael Echevarría estuvo presente. 

El grupo no era muy amplio, pero al llegar a la ninfa, le dije a un niño si esta le gustaba, este contestó muy fríamente y Rafael respondió con una de las suyas, después le pregunté lo mismo a un señor mayor y este si fue muy agradecido, se hizo mi amigo y empecé a bromear con él. De pronto vi que todo el grupo lo conocía y le hablaba con mucha familiaridad. ¡¡¡ Eran una familia completa!!!.

Podría haber unos 4 o 5 y el resto del grupo eran de la familia y claro fue cachondeo puro y duro. Todos eran muy amables, yo dándole juego al abuelo y resto siguiendo el juego. Me sentí uno más.

Al despedirme, notaba la cara de satisfacción y felicidad en ellos y eso no tiene precio.    





1 comentario:

  1. No te exijas tanto hombre, que unas veces se gana, otras se empata y otra se pierde.
    No pasa nada.

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