SAN VALENTIN Y EL DUENDE CORRIENDO POR EL JARDÍN.

Voy camino a casa y mis sentimientos se dividen, a  partes iguales, en: cansado, dormido, tranquilo, contento, satisfecho y reventado. El andar, por el campo, con zapatillas sin suela me ha provocado un dolor de pies horrible.

 

Hemos acabado de actuar a las 22:00H. A esa hora ya estábamos desmaquillados, con todo recogido, cambiados de ropa etc. Pero nos han tenido en el jardín, por temas de seguridad, hasta las 23.00 horas, ya que a casi todos los lugares que queríamos acceder estaban cerrados y debíamos esperar que nos abrieran los de seguridad.

Me ha traído mi compañera, Úrsula, hasta cerca de casa, son las 23:10 y voy caminando a ella.

Antes tenía un hambre horrible, pero el hambre, poco a poco, con tanto esperar se ha ido transformando en cansancio. Vengo bostezando como un condenado por todo el camino. Ahora quiero dormir. Además, el frío es otro factor que me pide cama. Durante todo el espectáculo  ha estado con nosotros constantemente. Qué frío más grande, sobre todo esperando el segundo pase en el puente de los enamorados,este me traspasaba la ropa.

Vengo contento y vengo tranquilo, me ha gustado lo que hemos hecho y como lo hemos hecho.

En ningún momento he estado nervioso y ni me he sentido tenso, ni antes de actuar, ni durante, ni después. Nunca.

Era algo que controlaba, solo era un trabajo con el que me iba a divertir.

Quizás ha faltado un poco de creación del personaje, de más interpretación. Pero debido a la limitación de tiempo que teníamos, tan grande, no nos daba pie a que pudiéramos desarrollar mucho las cosas.

Hemos hecho dos pases y de los dos os voy a dar impresiones. No puedo hacer como hacía en verano, un resumen por pase, entre otras cosas porque entre pase y pase no he podido escribir.

El primero ha sido un poco más de prueba y el segundo de disfrutar.

Quizás el segundo lo he visto como un todo, en cambio el primero, lo viví más como escenas sueltas y claro la curva de sentimientos del personaje, en el segundo, ha estado mejor desarrollada.

Los compañeros nos han felicitado, especialmente destaco a Samuel que es el más reacio, es más serio y nos ha dado la enhorabuena, nos ha felicitado y me ha dicho que le ha encantado mi torrente de voz, ya que, podía llegar, sin ningún problema de un puente a otro, toda la información que el personaje tenía que dar.

 Mi primera intervención era una especie de planteamiento del conflicto y es verdad que quizá en el primer pase he dado la información más rápida y en el segundo, todo tenía más sentido, la historia estaba más desarrollada y la he disfrutado más.

Ha sido todo muy fácil y tal cual lo habíamos planeado. Los tiempos han cuadrado muy bien.

El público del primer pase estaba pendiente a lo que decía, incluso me han aplaudido al acabar. La segunda escena ha sido un poco más complicada, porque los he pillado un poco más risueño, cuando la escena era triste. Al pedir colaboración amatoria, una pareja de chicas me han abrazado súper cariñosas y el juego ha sido muy divertido.

Para llegar a tiempo entre pase y pase, Úrsula y yo hemos corrido, literalmente, por la finca, a oscuras. Momento muy bonito y emocionante.

El segundo grupo era más animado, me apoyaron y rieron en todo momento. Cuando les pedí amor estuvieron muy apasionados y  durante el juego final salieron  hasta voluntarios.

Me encanto oír a la gente del segundo grupo gritar: “ Falet" (nombre de mi personaje el duende) cuando vieron a la ninfa, con ello me avisaban para que fuera a verla.

La única pega que le pongo es que no tenía un personaje muy definido, entre muchas cosas porque había poco tiempo y jugar más el personaje hubiera ocupado más minutos de los que teníamos establecidos  y porque había que proyectar mucho y a lo mejor al hablar con la voz distorsionada se perdería información.

Yo quería hablar con "z" pero Úrsula me aconsejó que no.

Lo más guay ha sido cuando en el segundo pase hemos intentado ir del lugar de la  primera escena, el puente, a la segunda, la casa palacio y pasásemos por donde pasásemos nos encontrábamos al público y hemos tenido que improvisar movimientos, acting, caminos alternativos etc. Éramos Jane y Tarzan corriendo por aquellos atajos. Gracias a eso he descubierto que ya se moverme por la Finca sin perderme.

Pero ha sido muy bonito: parejas de todas las edades, de todos los sexos, de toda condición social, otras con sus niños.  Había mucho amor y  muchas ganas de pasarlo bien, que para eso era San Valentín, o sea, 14 de febrero del 2017, martes.

Me quedo con el momento de correr cruzando el cenador, vestido de duende, de la mano de mi ninfa, feliz y amoroso. Ese momento no me lo quita nadie, me sentí el protagonista de una comedia romántica americana. Las ventajas que tiene ser actor, que vives cosas que no vive todo el mundo.